VICTOR HEREDIA_NUEVO DISCO

Heredia, un cronista de a pie

El músico presentará un álbum de canciones nuevas donde comparte la autoría

"La gente es la que define que las canciones sigan con vida", dice el artista Foto: LA NACION / Mariana Araujo

Cuando llegó a Sony Music, Víctor Heredia se sentó con Afo Verde y con la mejor de las sonrisas el productor le dijo: "Tengo un proyecto para vos". El cantautor escuchó atento la propuesta. Componer, a distancia, con Joan Manuel Serrat, Joaquín Sabina, Chico Buarque, Silvio Rodríguez, Víctor Manuel, Luis Eduardo Aute, Pedro Aznar, Luis Gurevich y otros cantautores de su generación. La producción llevó un año y medio. Del proyecto original quedaron algunos duetos compositivos y otros a mitad de camino como el de Fito Páez (Heredia mandó su poema a la dirección de correo equivocada), Serrat que estaba en gira con Sabina, o Buarque "que revolvió en los cajones y no encontró nada". Otros cumplieron con sus músicas a tiempo. Heredia aportó los poemas. El resultado es Ciudadano , un disco de canciones nuevas en coautoría, que presentará esta noche y el próximo 23 en el ND/Ateneo.

"Me pareció buena la idea y me emocionó mucho la manera que Silvio (Rodríguez) y Aute me devolvieron las músicas. Creo que particularmente con Silvio hubo una conexión particular a partir de lo que nos despiertan nuestros hijos más chicos (mi Camilo de 7 años y su Malva de 6 años). Eso nos ha reconciliado con muchas cosas de este mundo".

De ese encuentro con otros músicos rescata, también, la dupla con Jorge Fandermole en el tema "Madrecita cautiva": "Le dio un vuelo increíble al poema. Fandermole es una de los más grandes compositores que tenemos y a veces no entiendo que no tenga la proyección merecida. Su obra es inmejorable", reconoce el cantautor, reciente ganador del Festival de la Canción Viña del Mar.

-¿Estas canciones pueden competir con tus clásicos?

-Este es un debate que nunca pasó por mi cabeza. Me gusta cantar lo que compongo e incluso las comienzo a probar con la gente antes de grabarlas, y enseguida percibo si a la gente les gusta. Para mí todas son canciones lindas sino no estarían en mi repertorio pero quien termina definiendo si esas canciones van a seguir con vida es la gente.

-¿Te gusta seguir cantando esos temas que suenan como himnos irrepetibles en tu carrera?

-Yo soy afín a darle el gusto al público porque entiendo que cuando se establece una relación tan fuerte entre la gente y una determinada canción hay que respetar eso. Pero no es sencillo instalar una canción nueva.

-De las nuevas, ¿hay alguna que tiene pasta de clásico?

-Creo mucho en temas como "Lo cierto", "Demasiado", "Esperaré", o "Madrecita cautiva", que tienen muchas cosas para perdurar porque veo que se establece algo especial con la gente, con respecto a los otros temas.

-¿Cómo lo notás?

-Es difícil explicar, pero es la diferencia que uno nota cuando te das un abrazo con alguien que querés mucho y cuando te abrazan por compromiso. Los abrazos son distintos y con la recepción de las canciones pasa lo mismo.

-¿Sos un autor prolífico?

-Sí, soy prolífico en todo sentido. De golpe, cuando no me alcanza lo que escribo, me voy a la novela o la pintura. Creo que no todo lo que uno hace es bueno. Hay que trabajar mucho tiempo. Algunas cosas quedan por ahí y cuando busco en las carpetas viejas aparecen algunos hallazgos.

-¿Llevás un archivo de todo lo que escribís?

-En realidad, están repartidas por un montón de lados y en anotaciones insospechadas. Mi mujer a veces me reta y me dice que tengo que ser más prolijo. Pero uno nunca sabe cuando te da un ataque de inspiración.

-Gieco se quiere dedicar al cine y ahora vos a la novela ¿Qué pasa?

-Particularmente es algo que me está dando muchas satisfacciones. La novela Mera vida, que salió hace un año y medio anduvo muy bien. Quedé finalista del premio Planeta, así que quiero seguir escribiendo y conseguir un premio importante de literatura. Ya estoy terminando la próxima y me gusta mucho este oficio, porque a diferencia de una canción, siento que en la novela me puedo expresar de otra manera, y me permite debatir, desde adentro, con muchos personajes.