Marshall, quien ayudó a moldear
el sonido del rock and roll con sus innovadores amplificadores, murió
el jueves 5 de abril del 2012. Tenía 88 años.
Por GREGORY KATZ
The Associated Press
LONDON --
Jim Marshall, quien ayudó a moldear el sonido del rock and roll con
sus innovadores diseños para amplificadores, murió en una residencia
para enfermos terminales la mañana del jueves, informó su familia. Tenía
88 años.
Marshall padeció un cáncer y sufrió una serie de ataques de apoplejía, algunos severos, dijo su hijo, Terry Marshall.
"Mi esposa y yo estábamos con él cuando murió", indicó. "Tuvo un cáncer a finales del año pasado y se sometió a una operación, pero (el cáncer) regresó. Las últimas cinco o seis semanas su estado fue terrible. Ahora se encuentra en un lugar mucho mejor".
Jim Marshall fue ampliamente asociado con los fuertes sonidos de guitarra que sus amplificadores ayudaron a popularizar en los 60, cuando Pete Townshend de The Who, Jimi Hendrix, Eric Clapton, Jimmy Page y otros amontonaron amplificadores de Marshall para crear un sonido estruendoso de rock pesado.
Marshall no buscaba la precisión musical en sus amplificadores, sino un sonido que transmitiera un poder crudo y confuso. Los aficionados le acreditan el haber desarrollado los amplificadores que le permitieron a las bandas de garaje crear un poderoso ruido en pequeños salones de baile y gimnasios escolares.
Terry Marshall dijo que el primer amplificador lo produjo en 1960, unos años antes de la explosión musical que le daría al rock enfocado en la guitarra su lugar en la historia de la música.
Los primeros amplificadores de Marshall no parecían mucho - eran una simple caja negra con un parlante adentro y controles básicos arriba - pero empacaban una fuerza formidable.
Jim Marshall convirtió sus amplificadores en un negocio lucrativo, manteniendo la mayor parte de su producción en Inglaterra. La compañía tiene su sede en una pequeña fábrica cerca de Milton Keynes, al norte de Londres.
Marshall se enorgullecía de haberse resistido sugerencias de que mudara toda la producción afuera de Inglaterra para ahorrar costos.
Siguió siendo un admirador del rock pesado - y de los cigarros cubanos Montecristo y el whisky escocés de malta - entrados los años 70. Mantenía un juego de batería en su oficina.
En sus últimos años, Marshall se involucró en numerosas causas benéficas y en el 2003 la reina Isabel II lo hizo un oficial de la orden del imperio británico por su exitosa exportación de bienes fabricados en Gran Bretaña y sus varias obras caritativas.Marshall deja dos hijos, dos hijastros, nietos y bisnietos.
Marshall padeció un cáncer y sufrió una serie de ataques de apoplejía, algunos severos, dijo su hijo, Terry Marshall.
"Mi esposa y yo estábamos con él cuando murió", indicó. "Tuvo un cáncer a finales del año pasado y se sometió a una operación, pero (el cáncer) regresó. Las últimas cinco o seis semanas su estado fue terrible. Ahora se encuentra en un lugar mucho mejor".
Jim Marshall fue ampliamente asociado con los fuertes sonidos de guitarra que sus amplificadores ayudaron a popularizar en los 60, cuando Pete Townshend de The Who, Jimi Hendrix, Eric Clapton, Jimmy Page y otros amontonaron amplificadores de Marshall para crear un sonido estruendoso de rock pesado.
Marshall no buscaba la precisión musical en sus amplificadores, sino un sonido que transmitiera un poder crudo y confuso. Los aficionados le acreditan el haber desarrollado los amplificadores que le permitieron a las bandas de garaje crear un poderoso ruido en pequeños salones de baile y gimnasios escolares.
Terry Marshall dijo que el primer amplificador lo produjo en 1960, unos años antes de la explosión musical que le daría al rock enfocado en la guitarra su lugar en la historia de la música.
Los primeros amplificadores de Marshall no parecían mucho - eran una simple caja negra con un parlante adentro y controles básicos arriba - pero empacaban una fuerza formidable.
Jim Marshall convirtió sus amplificadores en un negocio lucrativo, manteniendo la mayor parte de su producción en Inglaterra. La compañía tiene su sede en una pequeña fábrica cerca de Milton Keynes, al norte de Londres.
Marshall se enorgullecía de haberse resistido sugerencias de que mudara toda la producción afuera de Inglaterra para ahorrar costos.
Siguió siendo un admirador del rock pesado - y de los cigarros cubanos Montecristo y el whisky escocés de malta - entrados los años 70. Mantenía un juego de batería en su oficina.
En sus últimos años, Marshall se involucró en numerosas causas benéficas y en el 2003 la reina Isabel II lo hizo un oficial de la orden del imperio británico por su exitosa exportación de bienes fabricados en Gran Bretaña y sus varias obras caritativas.Marshall deja dos hijos, dos hijastros, nietos y bisnietos.
2 comentarios:
muy buena nota! sin los amplificadores todavía seguiríamos viendo y escuchando un rock bastante primitivo!! aunque hubo cierto recelo en sus primero años de vida. Fuerte beso y abrazooo!
Tenes razón todo un cambio en el rock !!!!! Saludos !!
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